De buena mañana, desyunamos y cogemos el ferri en Andros con destino a la isla de Tinos, nuestro siguiente paso en el viaje por las islas cicladas. El precio por billete es de 19,50 euros por persona y el trayecto 1 hora y 45 minutos. (como es habitual hay variedad de horarios para viajar entre islas, en este caso de Andros a Tinos).
Durante el trayecto en barco podemos observar la cantidad de playas diminutas y desiertas que hay en la isla de Tinos, algunas de estas calas son de muy dificil acceso con coche e incluso inaccesibles desde tierra, con lo que su acceso solo se puede realizar por mar. Durante el viaje en ferry a Tinos (es la capital situada en el extremo sur de la isla) vemos como hay diversos pueblos pequeños, donde las casas estan construidas con orientación al mar y con los típicos colores griegos (blaco y azul).
Al llegar al puerto de Hora en la isla de Tinos, decidimos realizar todo lo necesario para preparar nuestra visita a este lugar que aparenta disponer de un encanto especial. De esta manera nos dirijimos a nuestro hotel, se trata del Delfinia que esta situada justo en frente del puerto. El hotel es un edifcio de 4 plantas, no tiene grandes lujos pero al entrar en las habitaciones comprobamos que son correctas y suficentes para pasar un día, ducharse y dormir cómodo. A destacar que el Hotel Delfinia facilita wifi gratis en todas las habitaciones (los alojamientos anteriores solo daban wifi gratis en la zona del hall del hotel).
A continuación nos dirigimos a la estación de autobuses de Tinos con la intención de viajar al cercano pueblo de Porto. La estación de autobuses esta justo en frente del muelle de ferris. Sobre la red de autobus de Tinos podemos decir que disponen de 8 líneas que se desplazan a todos los lugares de la isla. En la misma estación de autobus se pueden consultar las líneas de autobus que existen en Tinos, e incluso coger un mapa para llevar.
Al llegar a Porto, descubrimos la encantadora playa de Ioanmis, muy tranquila y sin masificaciones. La playa cuenta con una extensión de unos 200 metros con arena gris y agua transparente, al final de la playa existe la posibilidad de tomar un refresco, comer o alquilar una tumbona.
Justo al lado de esta playa y separada por una pequeña montaña arida esta la playa de Kiriaki con un encanto especial y similar a la anterior. Esta playa es similar al anterior en cuanto a la calma y la transparencia del agua, pero con arena dorada.
Desde estas dos playas es posible ver la isla de Mykonos que se encuentra justo enfrente separada por el Mar Egeo.
Siguiendo con nuestro viaje por la isla griega de Tinos, volvemos a comer a la capital (Hora), donde se encuentra nuestro hotel, tomamos una pita de pollo y una pita de cerdo en uno de los numerosos establecimientos que venden estos productos en el paseo del puerto de Tinos.
Por la tarde vamos a Kionia en bus donde descubrimos la preciosa playa de arena de Kionia, una playa larga y estrecha rodeada de pinos que proporcionan zonas de sombras.
Justo en frente de esta playa, a escasos metros descubrimos los restos del santuario / templo de poseidon, de manera que procedemos a visitar el templo, aunque realmente esta muy deteriorado y cuesta imaginar como debía ser originalmente. Según nos comenta la gente de los alrededores en la antiguedad era un templo que promovia grandes peregrinaciones para la adoración del Dios Griego Poseidon, tal y como pasa actualmente con la virgen de Lourdes.
El horario de visita 8:30 a 15:00 excepto los lunes que esta cerrrado. De todas formas, se puede ver perfectamente desde la verja de hierro que cubre los restos.
Actualmente el santuario de poseidon sufre una plaga de lagartos, así que no es dificil cruzarse con algún reptil de 15 centimetros durante la visita.
Al volver hacia Tinos decidimos hacerlo caminando (esta a pocos kilometros de Kionia) y por el camino existen algunas calas de aspecto atractivo que invitan a disfrutar de un baño en sus aguas.
Por último, visitamos el pueblo de Tinos que dispone de varias zonas comerciales para comprar souvenir, articulos de bisuteria, ropa, etc.
Otro punto de interés para visitar es la Iglesia Pagania Evangelistria (iglesión de la anunciación), templo ortodoxo neoclasico construido en marmol. Actualmente és un símbolo muy importante de la religión Cristiana Ortodoxa, recibiendo la peregrinación de gran cantidad de visitantes que viajan para visitar el lugar con la esperanza de recibir la bendición y milagros, que según la gente de la isla griega de Tinos proporciona.
Para cenar hay gran variedad de restaurantes en la zona, sobretodo si te introduces en las estrechas calles dela capital de la isla de Tinos. Esta vez el menú:
– Kalomaki (Pincho de Pollo con guarnición).
– Ensalada griega (con queso Feta, tomate, pepinillos, cebolla, aceitunas, alcaparras, pimiento verde y aceite).
Por la noche es un buen momento para pasear por Tinos y tomar un helado o un cocktail en alguna de sus terrazas.